A
fin de proteger su patrimonio cultural tangible e intangible, el Cabildo del
municipio de San Pedro Tututepec, en la costa oaxaqueña, emitió un decreto
mediante el cual reconoce el valor de los conceptos “Fandango de varitas” y
“Ocho venado”.
Dicho
decreto compromete a las autoridades municipales a proteger este patrimonio,
amparados por artículos de la Declaración de las Naciones Unidas Sobre los
Derechos de los Pueblos Indígenas, la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos y la Ley de Derechos de los Pueblos y Comunidades Indígenas
del Estado de Oaxaca.
El
“Fandango de varitas” es una expresión musical y dancística de Tututepec
realizada durante las principales fiestas de la comunidad. Comprenden a este
patrimonio el acompañamiento musical, los pasos y el vestuario.
Entre
las melodías que componen este acervo destacan los vinuetes, piezas que pueden
ser bailadas únicamente por niños o mujeres jóvenes, a quienes se considera
seres puros, y que sirven para lograr la conexión entre lo humano y lo divino
antes de iniciar una festividad.
Otros
géneros de esta danza son el juego, la chilena y el son, varios compuestos por
habitantes de Tututepec como Amancio Hernández Guzmán y Benigno García
Rodríguez.
Sobre
el concepto “Ocho venado”, se busca proteger a este personaje icónico de la
mitología mixteca, cuya biografía se entrelaza con la leyenda y, que entre
otros logros, está el haber unificado a los mixtecos en un sólo reino durante
la época prehispánica.
Con
esta acción, como se menciona en el decreto firmado por las distintas
autoridades de Tututepec, no se pretende excluir a otros del uso de estos
elementos culturales, pero sí protegerlos del robo y una apropiación inadecuada
que no reconozca el origen de estas expresiones.