Por ello es
importante que las y los capitalinos conozcamos y preservemos los
símbolos que han dado paso a la historia de la capital y que sin duda
forman parte de su identidad cultural, tal y como lo representa el
escudo de la princesa Donají.
En
los primeros años del México independiente ante la necesidad de volver a
los símbolos ancestrales con raíces propias, el Gobierno del Estado de
Oaxaca recurrió a la leyenda de la princesa Donají para crear el escudo
de armas de la entidad, surgiendo así el primer antecedente con la
imagen de la princesa zapoteca, elaborado por los artistas José Joaquín
Guerrero y José María Melo.
Por
decreto nacional del año 1825, el cual establecía que los escudos,
pendones y banderas anteriores a la independencia debían dejar de
usarse, el Ayuntamiento Municipal utilizó la imagen de la princesa
zapoteca como un símbolo de identidad.
Elementos del escudo

La
aljaba, el arco y la flecha del amor profano, un cocodrilo, símbolo
fuerte del agua que por descuido y confusión fue en algún momento
transformado en perro; el río y su caudal de tiempo antiguo aparecen
constantemente.